Un espacio con mucha luz, colores neutros y relajados y una distribución de muebles orientada a la funcionalidad parece la definición perfecta de cocina. Si esto es lo que estás buscando para el centro neurálgico de tu hogar, el estilo nórdico para la cocina es la respuesta. Te ofrecemos a continuación todas las claves que hay que saber sobre las cocinas escandinavas.
Las cocinas de estilo nordico
El estilo nórdico surgió en el siglo XIX en los países escandinavos como respuesta a la adversidad de un clima que exigía unos muebles de calidad, cuyo uso pudiera prolongarse en el tiempo y que, sobre todo, transmitiese sensación de claridad y luminosidad.
Actualmente, es un estilo en tendencia en dormitorios y salones de todo el mundo. Sin embargo, ha ido haciéndose tímidamente un hueco en la decoración y distribución de las cocinas.
Es por eso por lo que, a pesar de haber infinidad de estilos de cocina, es necesario darle una oportunidad a lo escandinavo y conocer a fondo todo lo que puede aportar al rincón más importante de la casa.
¿Qué es el estilo nórdico?
El estilo nórdico, típico de los hogares de países del Norte de Europa como Suecia o Dinamarca, ha comenzado a implantarse con fuerza en la zona del mediterráneo con el objetivo principal de aportar más luz, sencillez y tranquilidad a las casas del Sur de Europa.
De esta forma, las cocinas de estilo nórdico o escandinavo se caracterizan por transmitir estas sensaciones a través de tonos y colores claros y luminosos pero fríos, al mismo tiempo que se aplican materiales naturales como la madera o el lino para simbolizar la importancia de la naturaleza para esas culturas.
Los colores más representativos de este estilo son el blanco, el beige y el gris. Estas tonalidades depuradas y elegantes tienen como función reflejar la luz, escasa en los países boreales, para conseguir una sensación de claridad y amplitud en toda la estancia. Esto supone que sea un estilo a tener en cuenta e ideal para cocinas pequeñas.
En relación con los materiales, las cocinas de estilo nórdico muestran predisposición por la madera de roble, haya, abedul o, especialmente, pino, ya que es fácilmente moldeable; y por el mármol, la roca paradigma de la elegancia y la clase. Ambos materiales, al presentarse en tonos claros colaboran con esa finalidad de agrandar visualmente la cocina, al mismo tiempo que aportan sobriedad.
La decoración de una cocina nórdica
Una vez visto lo más característico del estilo nórdico en las cocinas, es importante conocer cómo implementarlo a través de la decoración y los muebles.
Los nórdicos son muy familiares y por eso la mayoría de sus cocinas suelen estar abiertas al salón, con una barra americana o una isla como elemento central y delimitante. La isla o la barra presentan, como norma general, mármol blanco, gris o negro, en caso de las personas más atrevidas y que quieren aportar un efecto de contraste. Asimismo, suelen añadirse unos taburetes de madera para crear una zona de office y garantizar el encuentro y la reunión.
Al destacar por su funcionalidad y orden, una cocina escandinava suele optar por instalar divisores en los cajones, divisores para la vajilla así como muebles alacena discretos.
Por su parte, no hay que olvidar el uso de la madera para muebles, cajones y utensilios de cocina, así como las propuestas de aportar detalles de carácter orgánico y natural como, por ejemplo, algodón, lino e incluso ramas para hacer honor a la especial vinculación escandinava con lo natural.
No obstante, la mayor dificultad a la hora crear una cocina nórdica auténtica es el espacio. Esto se debe a que, de manera similar al minimalismo, este estilo decorativo tiene preferencia por el espacio y evita las zonas recargadas. Es por eso por lo que la mejor solución es hacer muebles a medida para optimizar al máximo el uso del espacio y poner la distribución en manos de un profesional.
Accesorios de cocina de alta gama
Otro de los puntos a favor de las cocinas de estilo nórdico es que no tienen por qué ser puras, sino que pueden combinarse con otras tendencias decorativas para crear verdaderos espacios únicos e irrepetibles.
De esta forma, añadiendo detalles metálicos de acero inoxidable o paredes de ladrillo característicos de las cocinas industriales, se conseguirá añadir un toque vanguardista y moderno a la estancia sin perder el toque escandinavo.
Asimismo, elegir elementos en madera como el suelo o las mesas, así como decoración tradicional, es una apuesta segura para fusionar este estilo con la calidez de las cocinas rústicas. Todo ello unido a la luminosidad, hará de la cocina el lugar más cómodo de la casa.
En definitiva, el estilo nórdico para la cocina es un éxito rotundo que permite muchas variaciones y combinaciones con otros tipos de decoración. En Cocinas Schmidt la Eliana, como expertos del sector en Valencia, disponemos de gran variedad de muebles de cocina de todos los estilos. Del mismo modo, ofrecemos al cliente la posibilidad de diseñar su cocina a medida personalizando hasta el último detalle. ¡Y todo ello al mejor precio!